El lado positivo

 Quise dejar una sección dedicada exclusivamente para tratar el tema descrito en el título. Es importante pensar de manera positiva.

Al momento en que realizo esta bitácora, el número de estudiantes que han asistido a tutorías se ha reducido de gran manera. Aquí es donde vienen diferentes cuestionamientos, ¿me he equivocado en algo? ¿estaré fallando en mi labor como tutor? ¿dije algo que estaba mal?, etcétera. Por mucho tiempo estuve pensando, reflexionando y cuestionándome esas preguntas; pero llegué al punto en que quería ver todo de la mejor manera. Me dije a mí mismo que esto es bueno y que la decaída de asistencia de personas en las tutorías no se debía a algo malo en mí, sino al contrario; se debía a que logré que los estudiantes salieran del estancamiento en el que se encontraban; a que desarrollé en ellos el gusto por la física; a que incentivé la autonomía y que ya no era necesario el espacio de la tutoría. En los días en que no llega nadie a tutoría de física y me siento un poco afligido por ello, recuerdo en esto último y me gusta pensar que les está yendo bien.

Pude confirmar este pensamiento positivo que tenía un día que me encontré con una tutorada que no había vuelto, me dijo que ya todo iba mejor y que ya no veía necesario el espacio de la tutoría. Me alegró mucho esto, a pesar de que me gustaría que al igual que ella, sigan volviendo las personas que han tenido un proceso conmigo a lo largo del semestre, pero esto hace parte de la vida; el desapego.

Al cambiar los pensamientos negativos por los positivos, el no asumir cosas y el afrontar las dificultades como oportunidades de aprendizaje y mejora, hacen la vida más bonita y sencilla al mismo tiempo.